Concluyen los proyectos del Fondo Gallego para construir viviendas en Nicaragua y Cabo Verde
El Ayuntamiento de Vigo, socio de la entidad junto a los de A Coruña y Pontevedra, cofinanció las actuaciones para mejorar las condiciones de vida de 32 familias empobrecidas. Las mujeres y la población indígena fueron las principales destinatarias de estas iniciativas con las que mermarán las enfermedades y mejorará la economía local.
El Fondo Gallego de Cooperación y Solidaridad viene de cerrar el proceso de justificación de los proyectos iniciados en 2011 para mejorar las condiciones de habitabilidad en villas de Nicaragua y Cabo Verde.
En el archipiélago africano, la entidad colaboró con la Cámara Municipal de Paúl para rehabilitar viviendas en la localidad de Lombo Comprido. Se emprendieron obras como la construcción de baños y cocinas, reparación de fachadas, drenaje de aguas, adoquinado de las calles y recuperación de espacios verdes, además de una campaña de sensibilización ambiental. Aunque en un principio estaba concebido para beneficiar a 17 familias extremadamente pobres, casi la mitad encabezadas por mujeres, finalmente el proyecto pudo ampliarse a 21 casas, cuatro de ellas erguidas de raíz.
A través del Fondo Gallego, que destinó 2.000 euros este proyecto, el Ayuntamiento de la Coruña acercó 20.000 euros, el de Vigo 15.000 y el de Pontevedra 11.000 euros. La iniciativa mejorará cuestiones como el incidente de las enfermedades y la situación de las mujeres, que tendrán más intimidad e incluso podrán emprender pequeños negocios. La actuación se encuadra en el Plan Municipal de Igualdad y Equidad de Género que también había sido apoyado por el Fondo.
Por otro lado, en Nicaragua se actuó en parcería con el Instituto de Promoción Humana (Inprhu-Somoto) para contribuir a su proceso de desarrollo local con la construcción de once viviendas. La población rural chorotega de Sano José de Palmira, en el municipio de Totogalpa, fue la beneficiaria de esta actuación cofinanciada por el Fondo Gallego con 6.190 euros y por el Ayuntamiento de Vigo, socio de la entidad, con 52.000 euros.
Se instalaron latrinas, cocinas mejoradas, paneles solares o sistemas de captación de agua de la lluvia, pero también se fomentaron nuevos hábitos higiénico-sanitarios para reducir dolencias como el Mal de Llagas. Al tiempo, se formó las vecinas y vecinos en autoconstrución y agricultura orgánica. Este tipo de actuaciones también desincentivan la emigración y fortalecen la organización de las comunidades, al tiempo que se dinamiza la economía local con la compra de materiales.
El Fondo Gallego
El Fondo Gallego de Cooperación y Solidaridad está integrado por 93 Ayuntamientos y las Diputaciones de la Coruña y Lugo, que concentran a través de esta red sus esfuerzos en el campo de la cooperación al desarrollo. Se garantiza de este modo una gestión profesional y transparente, así como la realización de proyectos con impacto en los países del Sur y la sensibilización de la sociedad gallega a favor de la solidaridad internacional. Desde su fundación en 1997, el Fondo Gallego ha desarrollado 142 proyectos en 25 países y promueve numerosas actividades y materiales en relación a los desequilibrios Norte-Sur.
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En el archipiélago africano, la entidad colaboró con la Cámara Municipal de Paúl para rehabilitar viviendas en la localidad de Lombo Comprido. Se emprendieron obras como la construcción de baños y cocinas, reparación de fachadas, drenaje de aguas, adoquinado de las calles y recuperación de espacios verdes, además de una campaña de sensibilización ambiental. Aunque en un principio estaba concebido para beneficiar a 17 familias extremadamente pobres, casi la mitad encabezadas por mujeres, finalmente el proyecto pudo ampliarse a 21 casas, cuatro de ellas erguidas de raíz.
A través del Fondo Gallego, que destinó 2.000 euros este proyecto, el Ayuntamiento de la Coruña acercó 20.000 euros, el de Vigo 15.000 y el de Pontevedra 11.000 euros. La iniciativa mejorará cuestiones como el incidente de las enfermedades y la situación de las mujeres, que tendrán más intimidad e incluso podrán emprender pequeños negocios. La actuación se encuadra en el Plan Municipal de Igualdad y Equidad de Género que también había sido apoyado por el Fondo.
Por otro lado, en Nicaragua se actuó en parcería con el Instituto de Promoción Humana (Inprhu-Somoto) para contribuir a su proceso de desarrollo local con la construcción de once viviendas. La población rural chorotega de Sano José de Palmira, en el municipio de Totogalpa, fue la beneficiaria de esta actuación cofinanciada por el Fondo Gallego con 6.190 euros y por el Ayuntamiento de Vigo, socio de la entidad, con 52.000 euros.
Se instalaron latrinas, cocinas mejoradas, paneles solares o sistemas de captación de agua de la lluvia, pero también se fomentaron nuevos hábitos higiénico-sanitarios para reducir dolencias como el Mal de Llagas. Al tiempo, se formó las vecinas y vecinos en autoconstrución y agricultura orgánica. Este tipo de actuaciones también desincentivan la emigración y fortalecen la organización de las comunidades, al tiempo que se dinamiza la economía local con la compra de materiales.
El Fondo Gallego
El Fondo Gallego de Cooperación y Solidaridad está integrado por 93 Ayuntamientos y las Diputaciones de la Coruña y Lugo, que concentran a través de esta red sus esfuerzos en el campo de la cooperación al desarrollo. Se garantiza de este modo una gestión profesional y transparente, así como la realización de proyectos con impacto en los países del Sur y la sensibilización de la sociedad gallega a favor de la solidaridad internacional. Desde su fundación en 1997, el Fondo Gallego ha desarrollado 142 proyectos en 25 países y promueve numerosas actividades y materiales en relación a los desequilibrios Norte-Sur.